top of page

¿POR QUÉ NO ME GUSTA EL VINO? TE GUSTA, PERO TODAVÍA NO LO SABES.

  • Foto del escritor: Vive Con Vino
    Vive Con Vino
  • 17 feb 2021
  • 5 Min. de lectura

Disculpadnos si esperáis una respuesta bastante científica a esta pregunta, básicamente va a ser todo lo contrario. Nos vamos a basar en hechos sencillos de porqué ocurre esto, y os vamos a dar las pautas para que, si os apetece, os podáis meter dentro de este maravilloso mundo.

La respuesta es sencilla: No habéis encontrado un vino adecuado para vosotros. Y no sólo nos referimos a tintos o blancos, sino a vino dulces, semidulces, espumosos, rosados, y un largo etcétera.

Estamos acostumbrados, a determinar lo que nos gusta, o no, según la primera impresión, sin intentar investigar sobre el producto. Un ejemplo sencillo: “No me gusta el pescado”, a partir de esta primera premisa, la conclusión es la siguiente, como ESTE pescado no me ha gustado, sentencio a todos los demás y no solo eso, sino que no le doy oportunidad de cocinar ese mismo pescado de otra manera. En el vino lo podríamos extrapolar de la siguiente manera: “Como no me ha gustado ESTE vino (probablemente ni elegido por nosotros, sino, el primero que hay), ya lo sentencio”. Si esta primera impresión hubiese sido distinta, esto habría cambiado nuestro futuro sobre el vino. Podría ser que ese mismo vino, con una crianza distinta si te guste, o podría ser que otra variedad de uva te fascine, u otro tipo de vino. Por eso somos firmes defensores de todos los tipos de vino existentes y de que a cada uno le guste una cosa u otra.

El vino es como el amor: todos tienen uno que les gusta, aunque no lo hayan encontrado. Hay que seguir intentándolo.

EL VINO EN LA JUVENTUD


Las principales razones, por las que no suele apetecer el mundo del vino a los jóvenes son, principalmente fáciles de solucionar. Es más, están empezando a cambiar por la expansión del producto, que quiere atraer a este público.

  • El vino suele estar ligado a un lenguaje demasiado profesional y aburrido. Les vienen a la cabeza adjetivos del vino que les son abstractos y desconocidos, como: elegante, redondo, aterciopelado… Además, lo asocian con una actividad aburrida, muchas veces, y lo digo con conocimiento de causa, de una clase teórica.

  • Lo identifican con un ambiente serio. Recuerdan las típicas escenas de películas en las que los bebedores de vino prácticamente no hablan o solo lo utilizan para reuniones de trabajo y no para un disfrute personal o social.

  • Miedo a acudir a actividades, como catas, porque se sienten incomodos por no saber nada sobre el tema. Nadie nace aprendido. No se sienten identificados con los términos (antes mencionados) demasiados técnicos o simplemente prefieren otros tipos de catas más destinadas a disfrutar el vino con una buena sesión de música y un ambiente más festivo que les haga identificarse con él.

  • Poca publicidad dedicada a este público. Este es un tema difícil de solucionar, porque, lógicamente la ley no permite la publicidad de productos con cierta graduación alcohólica, pero estoy seguro que lo podemos solucionar con la transmisión de “boca a boca”, o promocionándolo dentro de actividades ya destinadas a adultos, como conciertos, cenas de empresa, comidas con amigos….

  • Tienen en la mente el típico vino con un sabor más amargo y a madera. No conocen vino más afrutados. Este aspecto debería ser solucionado por la hostelería y el ocio nocturno, actualizando sus cartas con diferentes tipos de vinos y promocionándolos.

  • No tienen la posibilidad de elegir diferentes tipos de vino en sus lugares de ocio. Con la moda del “tardeo”, sería fácil introducir el vino en ese ambiente y empezar a que les llame la atención.

  • Potenciar actividades culturales interesantes en las que el vino esté presente sin que sea el hilo principal. Puede ser desde una visita a un museo, un concierto de música clásica, una sesión de un DJ famoso, presentación de libros y un largo etcétera.

Esto va mejorando a pasos agigantados y ya son muchos más los que apuestan por el vino, no obstante, estamos lejos de otros países o incluso lejos del consumo que hubo en épocas anteriores. Desde la bodega a la hostelería se están actualizando en ofrecer versiones más divertidas del vino mejorando casi todos los puntos antes mencionados.


CÓMO EMPEZAR


Nuestra recomendación es que apostéis por vinos jóvenes y afrutados, como pueden ser los elaborados por la variedad blanca Chardonay, o la tinta Merlot. Estos vinos son veraniegos y con aromas y sabores a frutas maduras, dulces. La opción de vinos semidulces también puede ser buena para empezar a disfrutar del vino.

Os vamos a ayudar a encontrar vuestros vinos preferidos, este es el proceso que proponemos:

  1. Elige con qué tipo de vino quieres empezar: entre tinto, blanco o rosado; vino seco o dulce, ¿espumoso?. Esto es lo que tenemos que tener claro, pero tranquilo, si no te decides, puedes repetir el proceso dos o más veces. Una para los dulces y otra para los secos, o incluso, entre tinto, blanco o rosado. Poco a poco iras desarrollando un gusto y te picará la curiosidad por probar cosas nuevas.

  2. Empieza con vinos jóvenes y monovarietales (elaborados con una única variedad de uva). Con esto podrás identificar fácilmente que variedad es la que más se adecua a tus gustos.

  3. Ahora que ya tenéis elegida la variedad de uva, vamos a dar un paso más. Consigue un vino, de esa variedad, pero con algo más de crianza. Esto te ayudará a identificar sabores nuevos y saber si son de tu agrado.

  4. Ahora ya sabrás que variedad o variedades prefieres y con que crianza te gusta más. Es el momento prefecto para probar esa variedad, pero elaborada en otras regiones. Esto te dará curiosidad por ver como afecta el clima y la zona de cultivo al sabor y podrás, por tanto, identificar que zonas geográficas son tus preferidas.

  5. Por última, y si te lo puedes permitir, encuentra un vino que reúna todas las características antes mencionadas, pero, que, además, sea de una gama superior. Esto te permitirá ver la diferencia en el precio y podrás elegir si te merece la pena o no.

Si habéis realizado todo este proceso os aseguro que os habréis adentrado en este mundo del vino. Ahora ya no vais a poder salir, vuestro paladar probablemente habrá evolucionado y estaréis dispuestos a probar cosas nuevas y establecer vuestro propio criterio. Seguramente os empezaran a gustar cosas que en un primer momento rechazasteis, es lo ideal, os adentrareis en buscar cosas más curiosas, a probar vinos clásicos, pero también de pequeña producción, con uvas menos conocidas o con elaboraciones diferentes.


EN RESUMEN…


Os vamos a ayudar a quitaros algunos de los miedos que hemos hablado antes y daros algunos consejos para que podáis disfrutar del vino:

  • Usa una buena copa. Esto potenciara los aromas del vino y te dará ese punto de glamour que tanto nos gusta.

  • Disfruta del proceso de cata. Fase visual, observa el color del vino, si puede ser, con un fondo blanco y fíjate si tiende más a colores violáceos o anaranjados y si tiene mucho brillo o menos. Fase olfativa, mueve la copa y huele el vino. Intenta identificar 2 aromas básicos. Fase gustativa, toma un sorbo e intenta concentrarte en su textura y sus sabores. Para finalizar repite el proceso e intenta que te traslade a un momento de tu vida, esto te va a ayudar a disfrutarlo y sentir toda su pasión.

  • Prueba distintas variedades. No tengas miedo a experimentar cosas nuevas, ya sea con diferentes maridajes o con diferentes vinos.

  • Explora y disfruta de este mundo con tus amigos o familia. Siempre sabe el mejor el vino cuando tienes con quien compartirlo. Podréis realizar una cata y ver las diferentes impresiones de cada uno. Os animará a seguir realizando actividades con el vino, como visitas a bodegas o ferias de vino.

  • No tengas miedo a consultar con tus amigos que tipos de vinos te gustan y deja que te recomienden. Siempre podemos aprender cosas nuevas sobre este mundo hablando con gente que, como nosotros, les apasione.

Acabamos con una cita de Sócrates, que dice: “… nunca vas a beber el mismo vino dos veces, ya que, al 2º sorbo, el vino ya habrá cambiado, y tu… también”.

Esperamos que os haya servido de ayuda, y que intentéis darle una nueva oportunidad al vino. Os aseguramos que vale la pena y que pasareis muy buenos momentos compartiéndolo.



Comments


Publicar: Blog2_Post

Formulario de suscripción

¡Gracias por tu mensaje!

  • Instagram

©2021 por Vive con Vino. Creada con Wix.com

bottom of page